La temperatura normal del cuerpo humano es de 36.5°C a 37°C. Según los datos proporcionados por la Secretaría de Salud el 31 de agosto de 2015, una temperatura corporal superior a los 38°C se considera fiebre.
La Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud indica que la fiebre es una de las respuestas naturales del cuerpo a las infecciones. Dado que la mayoría de los virus y bacterias tienen más dificultad para sobrevivir en temperaturas superiores a los 37°C, esta elevación de la temperatura actúa como un mecanismo de defensa.
El sexo, la edad, la actividad física reciente, la ingesta de alimentos y líquidos, la hora del día y, en mujeres, la fase del ciclo menstrual pueden afectar la temperatura corporal.
Las infecciones que pueden causar fiebre incluyen:
- Infecciones respiratorias.
- Infecciones del oído.
- Infecciones urinarias.
- Gastroenteritis, tanto viral como bacteriana.
- Infecciones óseas.
Es importante destacar que la fiebre también puede ser una reacción a vacunas, aparecer en trastornos inflamatorios como la artritis, la colitis y la enfermedad de Crohn, y ser un signo de cáncer como la leucemia y los linfomas (de Hodgkin y no Hodgkin). Además, la fiebre puede ser causada por algunos medicamentos y otras condiciones médicas. Por esta razón, consultar a un médico cuando tiene fiebre es fundamental para recibir el tratamiento adecuado.
¿Qué pasa si tengo 35.3 de temperatura?
La temperatura corporal de 35,1 a 35,3 grados centígrados no es normal, y debe consultar de inmediato con un médico o seguir las instrucciones apropiadas para elevar la temperatura. La temperatura normal de un adulto suele estar entre 36,5° y 37,5° Celsius.
¿Cuándo tienes 37.5 es fiebre?
La temperatura corporal normal, medida en la axila, es de 37oC, por definición. Si la temperatura supera este límite, se llama febrícula, y si supera los 37,8oC, se llama fiebre, que puede alcanzar más de 41oC.
¿Qué pasa si tengo 36 grados de temperatura?
Una temperatura corporal de 36 grados se cree que indica subnormalidad o fiebre ligera. Sin embargo, la temperatura del cuerpo puede variar debido a una variedad de factores, como la hora del día, la actividad física realizada o el estado general de salud, lo que es normal. Además, la temperatura basal de 36 grados no siempre indica una condición médica grave.